El proverbio español «No todo el monte es orégano» quiere transmitir que, en cualquier situación, no todo es fácil ni placentero. Esta frase se utiliza para señalar que existen obstáculos o dificultades que impiden que lo que estamos haciendo sea tan sencillo y agradable como esperábamos.
El origen del proverbio
El orégano, planta aromática conocida y utilizada como condimento, representa en la cultura española algo positivo y fácil, ya que en el pasado también se usaba como remedio para varias enfermedades. Su etimología griega, «planta que alegra el monte», sugiere que el orégano estaba asociado con la bondad y la ligereza. Por eso, la expresión resalta el contraste con la realidad: aunque el orégano representa algo sencillo y beneficioso, no todo en la vida es tan fácil.
Por ejemplo:
Pensé que el trabajo sería fácil, pero no todo el monte es orégano.
En italiano, esta expresión se traduce como «non sono tutte rose e fiori» (literalmente, «no es todo de color de rosa») o «non è tutto oro quello che luccica» («no es oro todo lo que reluce»).
